lunes, 27 de julio de 2009

El Chisme y sus repercuciones

EL CHISME Y SUS REPERCUCIONES

INTRODUCCION: En Galatas 4:19 Pablo mirando a la iglesia sentía “dolores de parto hasta que Cristo sea formado en vosotros”. Pablo había notado un doble discurso en la vida de los cristianos de su época. Lo que decían no estaba acompañado con sus vidas.
A los Corintios (teniendo todos los dones), les tuvo que escribir 2 cartas, con grandes preocupaciones, se preparo con “la mejor comida”, pero noto que no podían digerirla por ser “bebes en Cristo”. En 1ª Cor. 3:1, les llamo “carnales”, por sus divisiones, pleitos, y comentarios carnales. También en el primer siglo la CHISMOGRAFIA infesto a la iglesia amada y preciada de Dios. Jesús dijo, “el que no recoge, desparrama”. Mat. 12:30

Alguien dijo…”El chismoso aparta a los mejores amigos”.

«Algunos hombres y mujeres en la congregación me cuentan cosas
íntimas sobre ciertos miembros de la iglesia, y no solo mujeres sino hombres también.
Yo sé que la Biblia condena el chisme. ¿Cómo puedo distinguir si lo que me están contando es
información necesaria o simplemente chismes? Y si son chismes, ¿qué hago?»
Y esto es un problema bastante común, en forma
especial para muchos cristianos nuevos en la vida cristiana. Felicito por haber discernido a tiempo cuando es un chisme que puede dañar a alguien.
Una de las instrucciones que el apóstol Pablo
da a las mujeres es que «ellas deben ser respetables, no chismosas» (1
Timoteo 3:11; Tito 2:3). Como pastor y líder, debemos dar ejemplo y no
ser chismosos. Pero para saber cómo mantener «la palabra siempre con gracia,
sazonada con sal» (Colosenses 4:6), hagámonos algunas preguntas.

1. ¿Qué es el chisme? No es fácil contestar esta pregunta y se
requiere mucha sabiduría. Yo empleo la siguiente definición: «Es decir algo
(aunque ese algo sea verdad) sobre una persona a otra persona que no tiene
por qué saberlo». Es más, el chismoso, por regla general, agrega su propio
tono al rumor y así cambia los hechos. (Tiene fiebre en la lengua, o lleva una maña o habito que adquirió de la familia, la sociedad o de las amistades mas cercanas)

2. ¿Cuándo no conviene escuchar a esas personas que están diciendo
algo sobre alguien? Valiéndonos de la definición mencionada, nunca debemos
escuchar una queja sobre otro si no estamos en condiciones de producir
cierta acción, es decir formar parte de la solución. Cuando una persona
viene con un rumor, siempre es bueno tratarla como si a ella o a el, no le gustaran
los chismes. No mostrar interés en los chismes con tacto y madurez
3. ¿Cuándo debo escuchar a lo que me están diciendo acerca de otros?
Es preciso que escuchemos siempre y cuando podamos ser parte de la solución
dando pasos para resolver el problema, por ejemplo, 1enviar a la persona a
aquel con quien había tenido el problema, 2 ir con la persona a la otra
parte, o quizás 3 hacer arreglos para que un anciano de la iglesia vaya con la
persona a fin de tratar de resolver la situación.

4. ¿Qué debo hacer con la persona que simplemente quiere hablar
sobre otros? Esto no es algo nuevo. La iglesia del primer siglo sufrió por
las mismas tonterías: «...aprenden a ser ociosas, andando de casa en casa; y
no solamente ociosas, sino también chismosas y entremetidas, hablando lo que
no debieran» (1 Timoteo 5:13).
Lo que me ha dado grandes resultados es contestar algo como: «Seguir
hablando sobre esto no sería de provecho ni para mí ni para ti porque no es
asunto nuestro». “Cada uno llevara su propia carga” Gal. 6:5. No olvidar que “la vida y la muerte están en la lengua” Prov. 18:21. CUIDEMOS DE NO ENTRAR EN CHISMES DONDE MATEMOS A LOS BEBES EN CRISTO CON LA LENGUA.

5. Cuándo escucho un rumor, ¿qué debo hacer? La mejor forma de
detener un rumor es encontrar la fuente, aquel que lo ha originado. Salomón
conocía la importancia de dicha fuente: «Sin leña se apaga el fuego, y donde
no hay chismoso, cesa la contienda» (Proverbios 26:20). Sin embargo, a veces
la persona que anda en chismes no quiere decir quién comenzó con el chisme;(le gusta tener el protagonismo, ser portador de “noticias extras”)
si éste fuera el caso, niégate a escuchar. SI!!!!
OJO….Una palabra de advertencia: El proceso de detener un chisme conlleva
el peligro de ofender a algunos. Sin embargo, si estamos siguiendo
principios bíblicos, la persona ofendida se ofende por su propio pecado y no
por el nuestro. (Si alguien es confrontado “se sanara de este habito” ). Los médicos
sostienen que “lo que duele cura”, y a veces el sangrar, hace que se logre comenzar el
proceso de sanidad. Por otro lado, Santiago explica la importancia de que el
chismoso se arrepienta: «Si alguno de ustedes se desvía de la verdad y otro
lo hacer volver, sepan ustedes que cualquiera que hace volver al pecador de
su mal camino, lo salva de la muerte y hace que muchos pecados sean
perdonados» (Santiago 5:19).

6. ¿Hay maneras de contrarrestar el chisme? En vez de participar
(pasiva o bien activamente) en un rumor, una manera de contrarrestar el
chisme es simplemente hablar bien de la persona. (Es hablar bien de la otra persona
“Ben-dicere” = BENDECIR, no es ser Falso, sino recalcar lo positivo de la otra persona,
que no esta presente). El apóstol Pablo exhortó a los creyentes a no decir malas
palabras, sino sólo palabras buenas que edificaran a la comunidad y fueran de beneficio
a quienes escuchan (Efesios 4:29). Ninguna palabra corrompida salga de vuestra boca, sino la que sea buena para la necesaria edificación, a fin de dar gracia a los oyentes.
En realidad, siempre es una buena idea decir cosas buenas
y ciertas sobre las personas de quienes estamos hablando y que están ausentes.

7. ¿Por qué los creyentes acuden con chismes especialmente a
las esposas de líderes o al pastor visita? Puede ser humillante descubrir por qué la gente
viene a nosotros con chismes. Podría ser que otros sepan que a mí me agrada
el chisme, que lo escucho con agrado. ¿Quién no quiere alguna vez escuchar
algo candente acerca de otro? «Las palabras del chismoso son como bocados
suaves, y penetran hasta las entrañas» (Proverbios 18:8).
Cuando la gente nos busca con los problemas de otros, podríamos
sentirnos importantes y creer ser algo cuando en realidad me engaño y no soy
nada (Gálatas 6:2,3). Sobrellevad los unos las cargas de los otros, y cumplid así la ley de Cristo. Porque el que se cree ser algo, no siendo nada, a sí mismo se engaña.
Desdichadamente, la posición de liderazgo atrae a personas a quienes les gusta estar con gente importante, sentirse parte de un círculo selecto, y pensar que por ser parte de él, ellos también son
importantes.
Para resumir, mi consejo es:
1.tener bien en mente qué es un chisme
2.no difundir ni escuchar chismes;
3.intentar siempre encontrar la fuente de un
rumor y frenarlo
4.hablar bien de los demás.
Y sobre todo, darle este consejo a cada cristiano: «sea vuestra palabra siempre con gracia, sazonada con sal, para que sepáis cómo debéis responder a cada uno» (Colosenses 4:6).

“piensen en todo lo verdadero, en todo lo que es digno de respeto, en todo lo recto, en todo lo puro, en todo lo agradable, en todo lo que tiene buena fama. Piensen en toda clase de virtudes, en todo lo que merece alabanza.” Filipenses 4:18 (V/Dios llega al hombre.)

Preparado por:
Alfredo Peña
Pastor.-

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